Raffaele de Rosa es garantía de esfuerzo, pundonor y TOP10. Lo volvió a demostrar en la primera cita del Campeonato del Mundo de Supersport, que visitó el circuito de Aragón. El piloto italiano monta este año una Ducati y muchos han sido los entrenamientos para adaptarse al nuevo reto. De hecho, dichas pruebas continuaron prácticamente en la primera carrera del fin de semana. Pese a todo, acabó 16º, mejorando 5 posiciones respecto a su salida desde la parrilla. Con más kilómetros sobre las piernas, los resultados comenzaron a mejorar rápidamente. Según el jefe de equipo, José Calero: “Está claro que una moto nueva siempre es un reto y esta moto exige trabajar muy duro en las próximas semanas. Sin embargo estamos contentos por la posición y por el trabajo hecho. Llegar al noveno puesto supone un empujón, una esperanza. Rafaelle siempre da lo mejor de sí mismo y se vacía en cada carrera. Es compromiso, trabajo duro y entrega. Un fin de semana favorable que nos permite seguir trabajando desde la humildad pero siempre con la mirada en las primeras posiciones”.

En la segunda carrera, ya en jornada dominical, el veterano Raffaele De Rosa recuperó terreno después de los problemas que tuvo en la sesión Superpole del sábado y firmó el noveno puesto, intercalado entre los dos representantes de Triumph. Once posiciones mejor que en la parrilla de salida, lo que demuestra que hay mucho por decir en las próximas citas del campeonato.